El conocimiento de los preceptos legales de Derecho europeo definidos en los reglamentos, directivas y decisiones de las instituciones comunitarias es indispensable ya no sólo respecto a operaciones intracomunitarias, sino también en la aplicación e interpretación del propio ordenamiento jurídico de los países miembros. Dentro de este área, la actividad del despacho se centra sobre todo en el Derecho de empresa y el Derecho procesal europeos.
El despacho asesora, entre otros asuntos, en relación a los requisitos legales exigidos para iniciar o desarrollar una actividad comercial o empresarial dentro del mercado único europeo (p.ej. las distintas formas de organización societaria y establecimiento de sucursales, temas de Derecho europeo de la competencia, la libertad de establecimiento y libre prestación de servicios). Especial trascendencia tiene el área de Derecho procesal civil y mercantil en cuestiones de aplicación de normas de colisión o de Derecho internacional privado y preceptos de Derecho procesal civil europeo (incuyendo procedimientos monitorios europeos y procedimientos de reconocimiento y ejecución de sentencias).